yoga individual

Me inicié en el maravilloso mundo del Yoga buscando un método definitivo para la salud integral

Vivir con dolor cada día es agotador, uno se levanta y se acuesta  acompañado del dolor, los efectos físicos y emocionales acaban añadiendo un problema mental, de depresión, de ansiedad o de patrones comporta mentales de evitación.

Sé muy bien qué es vivir con dolor cada día, es muy cansado, deprimente y uno acaba renunciando a muchas cosas.

Recuerdo con mucha empatía los dolores intensos que he sufrido durante muchos años de mi vida, desde que era adolescente.  El diagnóstico médico planteaba la posibilidad de que sufriera ataques reumatismo.  Recuerdo con 17, 18 años me trataban con penicilina. Aquello me dejaba más baldada aún; pues el dolor de aquella “bala” en mi glúteo me llegaba hasta el pie y me dejaba sin poder andar durante días.

Más por necesidad que por gusto me inicié en el mundo del yoga buscando un método definitivo de salud integral.

 

Al principio me pareció una excelente manera de mantener mi flexibilidad, mantener la armonía corporal y mental y librarme del temido dolor físico  y del estrés que este causaba. Pero, lamentablemente, la práctica que encontraba era una práctica muy exigente físicamente, que satisfacía mi ego pero mis dolores seguían conmigo.  No llegaba a encontrarme del todo bien.

Después de años practicando yoga en distintas partes del mundo por donde he viajado, finalmente y muy cerca de mí, me llegó la noticia de que Fairlie Gibson venía a Jimena de la Frontera con su retiro anual de Yoga inspirado en Scaravelli.

Yoga y Shiatsu en Sotogrande

¡Ah, esto fue un regalo del cielo!,  la práctica del Scaravelli Yoga ha superado todas mis expectativas; aprendí que el yoga va más allá del control físico de las posturas o mental en la meditación que conocía hasta el momento. Esta práctica, me ayudó a recuperar mi autentica naturaleza, a comprender mejor mi cuerpo y a dejar que sea él, el que guíe mis rutinas de yoga, más allá de instrucciones rígidas y de posturas controladas.

Aquí se dan la curiosidad por explorar, el ir sin prisa, el dejar que la gravedad haga su trabajo, la estimulación y desde luego nada de forzar.

Esta práctica hizo que mi sistema nervioso se revitalizara, y que la práctica del yoga o de cualquier otra actividad pudiera realizarla sin molestias.  

En estos 11 años que llevo enseñando yoga, ahora puedo decir honestamente que conozco el sistema de sabiduría que constituye el yoga: un conjunto de recursos para las necesidades de la humanidad. 

La práctica regular del yoga tiene influencias positivas en todos los niveles del ser humano, en lo físico, en lo mental, en lo espiritual; se alcanza un estado de serenidad y a la vez vitalidad. Os animo sinceramente a este encuentro con uno mismo que es el yoga.

  • Para todos los que buscan un enfoque, suave, tranquilo enfocado en la auto-regulación del sistema nervioso.
  • Para aquellos que buscan tener mayor agilidad, movilidad y menos dolor.
  • Para quien busca adquirir mayor capacidad de resiliencia.
  • Para aquellos que no esperan convertirse en atletas.

María Uceda       – Mayo 2021